Liderazgo, Motivación y Aprendizaje. Organizaciones en Crecimiento.

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Liderazgo, Motivación y Aprendizaje. Organizaciones en Crecimiento.

Algunas veces hemos oído y o quizás hemos estado hablando sobre cuales son las bases y fundamentos necesarios para que puedan darse pautas de crecimiento o avance en una organización. En esta nueva entrada, comentaremos algunas cosas que bajo mi punto de vista son puntos clave para avanzar en este mundo competitivo en el que nos encontramos envueltos.

Los fundamentos de los que estamos hablando estarían relacionados con los aspectos culturales relativos a cada organización y podríamos resumirlos en 3 puntos:

  • ¿Dispone nuestra organización del liderazgo adecuado?
  • ¿Está todo el mundo trabajando con la motivación necesaria?
  • ¿Nuestra organización está diseñada para ser una organización en continuo aprendizaje?

Vamos a intentar desgranar cada cuestión de la mejor manera que podamos.

  • Liderazgo adecuado.

Esta es una de las claves de toda organización en crecimiento. el papel del líder. ¿Que es un líder? ¿Quien es y que hace en nuestra organización? ¿Es solo alguien a quien todo el mundo sigue por su posición, o realmente dispone de un carácter, competencia y personalidad, que hace que todo el mundo crea ciegamente en él? En esta entrada estuvimos hablando de forma amplia de las actitudes y aptitudes más importantes que debe disponer un líder. Si bien, como es normal, existen algunas características que son comunes entre los líderes y que son las que los hacen diferentes del resto de personas.

Entre estas características comunes podrían estar por ejemplo el que todo buen líder «dispone de un plan». Dispone de una hoja de ruta y de un objetivo claro por el que trabaja y en el que cree firmemente, por lo que basa la mayoría de sus acciones en ese objetivo. Como responsables, si queremos arrancar una iniciativa en nuestra organización, debemos asegurarnos de que disponemos de un plan, al que podamos responder con un liderazgo fuerte y robusto que impida que otros puedan aplastarlo. Antes de empezar con una iniciativa o con un nuevo proyecto en nuestra organización, asegurémonos de encontrar un buen líder, que disponga de un plan sólido para arrancar.

Otra característica que es común en la mayoría de líderes, es que estos son capaces de «desplegar el plan», articular el plan y desarrollarlo de forma que sus seguidores (trabajadores) estén con él, lo entiendan y crean en él. Todo buen líder debe saber atraer, motivar y activar a sus seguidores. A veces, el líder, no solo debe trata de motivar al equipo en una dirección adecuada, sino que también debe saber motivar los corazones y los sentimientos de los que le siguen.

La última característica común, es que el líder «está plenamente centrado en su plan». No pierde el objetivo nunca de vista y es capaz de mantener la dirección a pesar de los obstáculos que se va encontrando por el camino. El líder cree en los valores de su plan y tiene el carácter para la toma necesaria de decisiones importantes y difíciles. Para ello es muy importante que el líder sea capaz de distribuir este liderazgo entre su gente, atribuyendoles la parte necesaria y suficiente de responsabilidad a cada uno, para que aprendan a remar en la misma dirección. Un líder centrado en su plan, es un gran solucionador de problemas, imaginativo, creativo y con principios, en el que todo el mundo confía ya que es capaz de mantener el valor necesario para gestionar las decisiones importantes.

  • Motivación para seguir adelante.
En este punto, el liderazgo es crucial. El líder del equipo o de la organización debe conocer como actuar con la motivación. Debe ser capaz de preparar al grupo para los cambios, la constancia en los cambios de todo lo que está por venir es una de las claves. El líder debe hacer entender a su gente que el mundo está cambiando, las fabricaciones se mejoran día a día, las organizaciones son cada día más competitivas, las personas están cada vez más preparadas, y por tanto, si nos quedamos estancados, lo que está pasando en realidad es que estamos retrocediendo frente a la competencia.

Por tanto debemos adaptarnos a los cambios, debemos estar en continuo crecimiento para mejorar, y el líder ha de ser capaz de motivar a su grupo para que tenga objetivos. Un liderazgo con características de liderazgo distribuido debe ser capaz de aumentar la participación de los trabajadores, aumentar su motivación, aumentar su capacidad y su mentalidad al cambio, aumentar y desarrollar su mentalidad para alcanzar las metas que merecen la pena ser alcanzadas.

Por ejemplo, los trabajadores motivados y comprometidos son capaces de hacer sugerencias de mejora. Algunas plantas de Toyota obtienen más de 50000 sugerencias de mejora, y la mayoría de estas acaban implementándose, más del 90%.

Pero, ¿Cual sería la manera de que nuestro equipo haga su trabajo perfectamente y trate de mejorar cada día? Sin duda, hay que construir una filosofía de organización, buscando que esta sea lo más dinámica posible. el objetivo es hacer que crezcan excelentes personas, que entiendan y apoyen la cultura de la organización. Para ello, la formación es también un punto importante en la motivación de los trabajadores, y debe ser columna vertebral de la gestión para integrar a las personas con la técnica y el conocimiento. Las conductas positivas en el desarrollo de la mejora continua ayudan a motivar a las personas.

Parte de la motivación también está sujeta a la pirámide de Maslow. La gente también necesita y debe tener un grado de seguridad en el trabajo y debe sentir que pertenece a un equipo, que dispone de autonomía sobre el control del trabajo. Estas y otras necesidades representan un reto complicado durante el diseño del personal en la organización. Los objetivos desafiantes, el feedback por lo progresos alcanzados, todo ello contribuye a mejorar la motivación de las personas.

  • Aprendizaje continuo.
El talento es imprescindible y la capacidad para trabajar en una organización en el que se desarrolla el aprendizaje continuo, más todavía. Durante el trabajo diario surgirán problemas. Los problemas no deben ser vistos como un obstáculo en el camino, sino que deben ser vistos como una oportunidad para mejorar, una oportunidad para aprender y una oportunidad para crecer. Si no tenemos problemas que sean capaces de retarnos diariamente, poco sentido tiene la mejora.

Un buen lider ha de ser capaz de crear problemas donde previamente no existían. El disponer de un buena dirección técnica en la organización nos ayudará en el trabajo con la resolución de problemas, en el crecimiento del equipo, en la creación de una organización en continuo aprendizaje.

Un enfoque interesante es poner al personal de trabajo en situaciones difíciles, para que aprendan la mejor manera de salir de los problemas. El aprendizaje es un proceso continuo que debe llevarse a cabo en toda la organización, y en todas las áreas, con el objetivo de motivar y formar a las personas, con el objetivo de que compartan los conocimientos con sus compañeros.

Debemos trabajar con nuevos patrones de pensamiento. Un organización que aprende no solo debe generar mayor volumen de negocio, sino que debe desarrollar y aprender nuevas habilidades, conocimientos y capacidades. Convertirse en una organización de aprendizaje verdadero, la capacidad de aprendizaje de la organización debe ser el desarrollo y el crecimiento a través del tiempo, ayudando a sus miembros a adaptarse a un entorno competitivo en constante cambio.

La organización debe aprender de sus errores, determinar la causa real de los problemas, proporcionar medidas eficaces, formar y capacitar a las personas para poner en práctica esas medidas, y poner en marcha un proceso para transferir el nuevo conocimiento a las personas adecuadas para que sea parte del repertorio de la compañía para generar crecimiento.