«Si no has leído cientos de libros, eres funcionalmente analfabeto y serás incompetente porque “Tus experiencias personales no son lo suficientemente amplias para sostenerte”. Esta cita es de James Mattis, el vigésimo sexto secretario de defensa de los Estados Unidos.
Quienes alcanzan el éxito (y quienes quieren prosperar y avanzar en sus vidas) se exponen constantemente a cosas nuevas. Viajan, leen libros, conocen gente nueva. Valoran la educación y el aprendizaje, además del crecimiento. Buscan la sorpresa, la novedad, lo desconocido, lo que no saben. Buscan hacer continuamente cosas diferentes.
¿Por que?
Porque si no lo hacen, su cerebro, su subconsciente los lleva de nuevo a la homeostasis. A nivelarlos para que no tiendan a hacer algo peligroso, algo diferente, inseguro, nuevo, todas esas cosas por las que sus cerebros no están muy contentos.
Nuestro diseño cerebral evita el estrés, minimiza el dolor, elimina las sorpresas y se resiste al cambio. Ni más ni menos. Promueve la rutina y los hábitos, y nos inunda de cientos de advertencias y de warnings, mientras trata de mantener intactos sus propios valores rectores (tus creencias más arraigadas).
Por tanto, estas personas rompen con gusto sus paradigmas actuales, por otros nuevos y mejores, sabiendo que, con mejor información, pueden ser capaces de tomar mejores decisiones. Pueden fijarse mejores metas y objetivos. Pueden tener mejores razones.
El conocimiento es clave para establecer metas. No puedes perseguir algo que no sabes que existe. Cualquier cosa que estés persiguiendo ahora mismo se basa en las experiencias que has tenido. El poder crear mejores metas, y así diseñar un futuro mejor, requiere aprender más, cambiar tu perspectiva y abrirte a algo nuevo. Algo desconocido.
Personalmente he tenido cientos de errores que me han llevado a ser humilde con mi vida. Pero todos esos fracasos son los que me han moldeado como persona, y son los que me han transformado en lo que soy ahora mismo, en este momento. La mayoría de ellos han venido de exponerme. De hacer algo diferente.
Nunca evites experiencias que sean capaces de cambiar algo en ti. Tu Yo del futuro debe ser mejor, más fuerte, más capaz, más sabio de lo que es actualmente, y eso solo lo puede conseguir exponiéndote, y creando experiencias diferentes, nuevas, retadoras y desafiantes.
Tampoco es necesario que te vayas al Himalaya a subir una montaña para hacer algo diferente. Confía en los cambios incrementales y en el interés compuesto. Solo has de volverte consciente de algo que repitas habitualmente durante el día. ¿Qué es lo que haces que se ha vuelto repetitivo en tu vida? ¿dónde está la carrera de la rata que vives cada día? La rueda de hámster, como lo quieras llamar.
Te explico un ejemplo. Habitualmente dedico el sábado por la mañana a hacer lo habitual de un sábado. Recoger la casa y poner en orden mucho de lo desordenado durante la semana. Este sábado mi pareja tenía un workshop a 50 km de donde vivimos habitualmente.
- Opción A: Me quedo en casa, y hago lo habitual de cada sábado.
- Opción B: La acompaño, busco una biblioteca y escribo el post que estas leyendo.
Escogí la opción B, la que me saca de mi zona de mi comodidad. La que me permite conocer algo nuevo. La que me permite tener un nuevo entorno. La que me permite aprender. Puede parecer una tontería. Pero estaba siendo intencional, ya que mi cerebro me decía. ¿Porque te vas a mover? Quédate en casa. Está lloviendo, no te compliques la vida. Hace frio. Puedes hacer lo mismo aquí.
Si, puedo hacer lo mismo, pero si me hubiera quedado, no me hubiera expuesto a nada nuevo. Y eso es lo que quiere mi cerebro, pero yo no quiero eso. Si lo hubiera hecho, no hubiera tenido la oportunidad de conocer un nuevo entorno, nuevas personas, nuevas ideas. Y probablemente este post no hubiera sido este. Quizás no hubiera sido ninguno.
EXPONERTE a la vida es la primera fuente de donde puedes sacar tus objetivos y metas personales. (esto se vuelve igual para tus metas profesionales.) Necesitas vivir experiencias diferentes que te impulsen. Pero no es necesario que las elijas, vienen solas a partir de tu exposición.
¿Qué es lo que repites cada día y que podrías hacer de forma diferente? Hazlo, aunque te cueste, y explícame que has descubierto.